La higiene es esencial para cuidar la vida de tu canino, pues una cama sucia es una importante fuente de patógenos, que incluso pueden propagarse entre los diferentes miembros de la familia, en parte gracias a que los perros son animales activos que disfrutan descubrir, pasear en el parque, jugar en el barro, husmear diferentes zonas, y en sí, realizar actividades poco higiénicas.
En principio, se recomienda que al llegar de una caminata procedas a limpiar cuidadosamente las patas del canino, con el propósito de limpiar cualquier residuo o sustancia que se haya adherido durante el paseo, lo que a su vez debe complementarse con baños y cepillados periódicos de su pelaje.
Elección de la cama
Sin duda, es necesario asegurar una buena higiene del espacio donde descansa el perro, sin embargo, esto inicia desde el momento de compra de la cama, por ello se recomienda leer con detenimiento la etiqueta, a fines de considerar si el método de lavado que recomienda el fabricante en sencillo y factible.
Por ende, se suele recomendar seleccionar camas que se puedan introducir en la lavadora y secadora, pues así podrás resolver rápidamente accidentes, por ejemplo, si tu perro orina la cama.
Pasos para la limpiar la cama de tu perro
- Aspirar
El primero paso consiste en pasar la aspiradora por la colchoneta de la cama, con el objeto de atraer y retirar gran parte de los pelos y suciedad que se ha acumulado en la misma, lo que a su vez evita que estos residuos perjudiquen la lavadora o secadora.
Así mismo, si lo consideras puedes un utilizar papel adhesivo para retirar una mayor cantidad de pelo, lo cual puedes realizar antes de iniciar con el lavado, pero también es de gran ayuda entre los lavados.
- Lavado
El introducir la cama del perro en la lavadora será un aliado para cuidar a los tuyos, no obstante, sino puedes hacerlo de este modo tendrás que lavarla a mano, en casos de que la cama sea muy grande, o simplemente no sea apta para este electrodoméstico. Del mismo modo, se recomienda realizar este proceso al menos una vez al mes.
A su vez se sugiere hacerlo con agua caliente, a fines de eliminar la suciedad con mayor eficacia. Finalmente es necesario utilizar productos de limpieza adecuados, es decir, detergentes dog-friendly, a fines de no lastimar la piel de tu canino, igualmente se deben emplear productos libres de amoniaco, ya que este último elemento puede contribuir a que tu perro asocie su cama, con un lugar para orinar.
Así mismo, se recomienda iniciar el proceso de limpieza por la mañana, a fines de que para la hora de descansar la cama ya se encuentre seca. Cabe destacar, que si la cama cuenta con una manta, esta también debe limpiarse adecuadamente.
En conclusión, la mayoría de autores coincide en que la cama de los caninos debe limpiarse al menos una vez al mes, sin embargo, otros mantienen que este proceso debe realizarse una vez a la semana.